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Los Restos de Federico García Lorca por fin serán exhumados

Mover o no Mover a García LorcaTEXTO

Luego de la rotunda negación de sus seis sobrinos carnales, los hermanos Vicenta, Concepción y Manuel Fernández-Montesinos García y Gloria, Isabel y Laura García-Lorca de los Ríos, por fin se ha decidido legalmente que sus compañeros de fosa común tienen derecho de volver al mundo exterior y con ellos los restos mortales del gran poeta. Justa retribución para unos, grave afrenta a la historia para otros. Es verdad que hay mucho de valor histórico y hasta literario en mantener ese lugar como sepulcro incierto de Lorca. Yo mismo comulgo con esa idea, por considerarla lo bastante romántica y ambigua para mi temperamento. Pero más intereses están en juego a la hora de considerarlo.
Lo más conspicuo en todo este asunto es el avance de las pasiones fascistas en muchos estados europeos. España por ejemplo, donde jóvenes con la memoria distorsionada se aventuran a repetir las travesuras de sus falangistas abuelos, a quienes seguramente admiran. No me es ajena esta tentación. Ya en algún momento de mis mocedades más mozas leí Mi Lucha y me atreví a pensar si acaso el único error de Hitler habría estado en su empeño por matar judíos. Era un poco sociópata en ese entonces, como todo adolescente saludable. Y también no hace mucho, estando en casa de un compañero y amigo me mostró en tono de confidencia una cajita diciéndome que era su mayor orgullo: su abuelo combatió en la segunda guerra mundial y tenía en sus manos fotos, cartas, documentos y un par de medallas de él. Tuve tres razones para rascar pensativamente mi entonces larga cabellera: una, su abuelo lucía uno de esos gallardos uniformes diseñados por Ugo Boss para las SS; otra, mi amigo era de origen judío-alemán y la más perturbadora... él estaba fascinado con todo ello.
Narro todo esto con la única finalidad de advertir lo fácil que es para los jóvenes españoles el caer en las trampas y recovecos más Barkerianos de la historia y quedar atrapados. La presencia cada vez más activa de organizaciones pro-franquistas es un hecho que se hace evidente cada que lanzan panfletos incitando a la violencia contra los inmigrantes o la gente de distinta raza. No soy partidario de la adoración a esqueletos, pues prefiero la memoria viva de las ideas. Está sin embargo la excepción de Lorca, pues el recuerdo su caso induce cuestionamientos que hasta la fecha aún provocan resquemor en las sociedades con fuerte presencia de la derecha, como los derivados por las posibles causas de su muerte: ¿tuvo que ver su filiación con las ideas socialistas?, ¿fue debido a su escandalosa homosexualidad? ¿Nada de lo anterior?
El cuerpo del debate ya está casi afuera.